Señor Respondeme

Leamos 1 Reyes 18 verso 32 y siguientes, dice así.

Entonces Elías dijo a todo el pueblo: Acercaos a mí. Y todo el pueblo se llegó a él; y él reparó el altar del SEÑOR que estaba arruinado. Y tomando Elías doce piedras, conforme al número de las tribus de los hijos de Jacob, al cual había sido [dada] palabra del SEÑOR, diciendo: Israel será tu nombre; edificó con las piedras [un] altar en el nombre del SEÑOR; después hizo una zanja alrededor del altar, en que cupieran dos medidas de simiente. Compuso luego la leña, y cortó el buey en pedazos, y lo puso sobre la leña. Y dijo: Llenad cuatro cántaros de agua, y derramadla sobre el holocausto, y sobre la leña. Y dijo: Hacedlo otra vez; y otra vez lo hicieron. Y dijo: Hacedlo la tercera vez; y lo hicieron la tercera vez. De tal manera que las aguas corrían alrededor del altar; y también había llenado de agua la zanja. Y cuando llegó la hora de ofrecerse el holocausto de la tarde, se acercó el profeta Elías, y dijo: SEÑOR Dios de Abraham, de Isaac, y de Israel, sea hoy manifiesto que tú [eres] Dios en Israel, y que yo soy tu siervo, y que por mandato tuyo he hecho todas estas cosas. Respóndeme, SEÑOR, respóndeme; para que conozca este pueblo que tú, oh SEÑOR, eres el Dios, y que tú convertirás de nuevo el corazón de ellos [a ti]. Entonces cayó fuego del SEÑOR, el cual consumió el holocausto, y la leña, y las piedras, y el polvo, y aun lamió las aguas que [estaban] en la zanja.


Si leemos todo el capitulo entenderemos que Elías había desafiado a los profetas de Baal, y el desafío consistía en invocar cada uno a su Dios y aquel que respondiera con fuego, sería el verdadero Dios.

Los profetas de Baal ya han fallado y cuando le toca a Elías, el hace algo que tiene una enseñanza para nosotros hoy. En el verso 34 dice que Elías ordeno que llenaran cuatro cantaros de aguas y lo derramaran sobre el altar. Bien, si el desafió de que fuego descendiera del cielo era, ante nuestros ojos y ante los ojos de los hombres de aquel tiempo, difícil; Elías lo hace mas difícil aún volcando cuatro cantaros de agua sobre el altar, y hizo una zanja alrededor del altar para que esa agua derramada no se esparciera. ¿Que sentido tenía el agua en esto? el agua tenia la función de ahogar el holocausto, recuerda cuando Jesús hablaba de la semilla en Mateo 13:7 cuando dice que la semilla cayo entre espinos y los espinos crecieron y la ahogaron; esta es la figura que quiero que te hagas. El agua tenia la función de ahogar, de evitar que el fuego encendiera el holocausto.

Entendamos ahora que significa ahogar, según el diccionario es "quitar la vida a una persona o a un animal, impidiéndole la respiración, ya sea apretándole la garganta, ya sumergiéndolo en el agua, ya de otro modo" también significa "Oprimir, acongojar, fatigar".

Sabes que aquellos que padecen de ataques de pánico entre otros síntomas que tienen uno de ellos es la sensación de falta de aire, de ahogo.

 Creo que esto basta para hacernos una figura de lo que significa "Ahogar". Ahora, en el altar hay otro elemento que es la ofrenda, aquello sobre lo cual había sido derramada el agua, entendemos por ofrenda todo aquello que se ofrece y se dedica a Dios.

Traigamos estas figuras y apliquémosla a nuestras vidas hoy, ¿cual es la enseñanza? Todo aquel que ha dedicado su vida a Dios experimentara este tipo de agua, que tiene el propósito de ahogar, de sofocar, de quitar la vida, estas aguas que pueden provenir de distintas fuentes, fuentes externas, internas, oposición espiritual, etc. Solo pondrán en evidencia que Dios responde en medio de situaciones adversas, contrarias y difíciles y que su repuesta viene a pesar de todo pronóstico o sentencia de muerte que pueda haber sobre nuestra vida o sobre cualquier situación.

Así que Elías ora "SEÑOR Dios de Abraham, de Isaac, y de Israel, sea hoy manifiesto que tú [eres] Dios en Israel, y que yo soy tu siervo"

Unámonos ahora a esta oración y hagamos nuestras las palabras de Elías "Sea hoy manifiesto", Sea hoy manifiesto que tu eres Dios en mi casa, Que tu eres Dios en mi familia, Que tu eres Dios en mi trabajo, Sea hoy manifiesto. Respóndeme, SEÑOR, respóndeme; para que conozca este pueblo que tú, oh SEÑOR, eres el Dios.

Dios te bendice.