domingo, 26 de septiembre de 2010

Crees


Hoy estoy leyendo el Evangelio según Juan capitulo 9: 38 aquí se registran las palabras de uno que había sido sanado de ceguera, la historia puede que sea conocida por algunos, pero para aquellos que no la conocen paso a resumírtela, el que dijo las palabras que se encuentran en el verso 38 del capitulo 9, el que acabamos de leer, es uno que mendigaba en las calles y era ciego, dice que Jesús paso cerca de el y lo observo, después de una breve conversación con sus discípulos Jesús escupe en la tierra, hace barro y se lo unta en los ojos, y le ordena ve a lavarte en el estanque de Siloe, el se lava y cuando lo hace recobra la vista, después de esto todos estaban asombrados por que le reconocían y se preguntaban como era que ahora veía; la gente lo interroga, los fariseos o religiosos de ese tiempo le preguntan ¿como es que ahora ves? y el solo se limita a contestar lo sucedido, dijo; "ese hombre llamado Jesús hizo esto y esto y ahora veo".

Pero dice que los fariseos no le creían y llamaron a sus padres para que confirmara su ceguera, pues bien, digamos en resumen que se armo un gran revuelo, y este que había sido ciego estaba en medio de un montón de gente que no creía en Jesús, que odiaba a Jesús, no era un buen ambiente, si alguno se decía seguidor de Jesús lo expulsaban de la comunidad, así que bastante valiente fue este hombre para decir "Si este hombre no viniera de parte de Dios, no podría hacer nada" así que esto fue lo último que dijo por que efectivamente lo expulsaron de la sinagoga.

Cuando Jesús se entero de esto fue a su encuentro y le pregunto "¿Crees en el hijo del hombre? y este hombre después de haber estado en medio de un montón de gente que decía que Jesús no venia de parte de Dios, y de haber sido expulsado de su comunidad responde "Creo, y le reconoce como Señor y postrándose le adoro.

Bien, cual es la enseñanza, creo que muchos nos encontramos rodeados de gente que no cree en Dios, de gente que no quiere saber nada de Dios, un mundo hostil hacia las cosas espirituales, si somos de aquellos que dicen y confiesan creer en Jesús corremos el riesgo de ser expulsados o tratados con indiferencia, no es ciertamente agradable un ambiente de incredulidad, aquellos que amamos a Dios y que le hemos hecho nuestro Señor quisieramos evitar estos ambientes, pero allí están, y tenemos que relacionarnos con ese medio.

Pero lo interesante es la pregunta que Jesús le hace a este hombre después que fue expulsado, después que fue apartado, y creo que es la pregunta que resuena en los aires hoy, ¿CREES? a pesar de que a tu alrededor y en tu círculos de relaciones hay un montón de gente que no cree, pregunto ¿tu crees? crees en aquel que puede dar vista a los ciegos, puede libertar a los cautivos, convierte el agua en vino, resucita los muertos, crees en el que creo los cielos y la tierra, pregunto ¿crees?. Una pregunta muy personal y directa, que tiene dos opciones como repuesta, si o no.

Mas adelante en Juan 11 tenemos el relato sobre Lázaro un amigo de Jesús que había muerto y después de algunos días Jesús se hace presente en la casa de su amigo muerto, una de sus hermanas, Marta al oír que Jesús le pide a algunos que quiten la piedra del sepulcro, le dice Señor ya debe oler mal, pues hace cuatro días que esta allí. a lo que Jesús le contesta, Marta ¿no te he dicho que si crees verás la gloria de Dios?

Otra vez en medio de una situación imposible, con un hombre muerto hace cuatro días, la pregunta de Jesús ¿Crees?.

Vamos amigo, esta es la pregunta que tienes que hacer resonar fuerte en tu corazón en el día de hoy, ¿Creo? ¿Creo en aquel que todo lo puede? si te atreves a creer tal como se le dijo a Marta hoy se te dice a ti, ¿No te he dicho que si crees veras la gloria de Dios? y en un momento sentirás la voz de Dios ordenando a las cosas muertas que vivan. Solo cree.

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